Según un estudio realizado por el Instituto Médico Europeo de la Obesidad, el 83% de los españoles se saltan la dieta en las celebraciones y la Navidad es, sin duda, la prueba más evidente de ello. Las cenas de empresa, las comidas familiares, las copas y la ingente cantidad de dulces que consumimos en estas fechas contribuyen a que sumemos unos cuantos kilos durante las fiestas, concretamente entre 3 y 5.
Por eso, los nutricionistas de IMEO nos dan algunas recomendaciones para engordar lo mínimo:
1. Día de compensación tras una comida copiosa: “No se trata de pasar la festividad “a dos velas”, sin probar bocado fuera del régimen, sino de disfrutar la comida con cierta moderación y el día siguiente compensar con una dieta restrictiva”.
2. Reservar los dulces hasta el 20 de diciembre. Quizá esta recomendación llegue tarde para muchos, pero lo ideal es comprar la cantidad justa en lugar de empezar a comerlos desde primeros de mes.
3. Tomar un aperitivo 20 minutos antes de la comida o cena abundante. Podéis acompañarlo de un refresco con gas light o cero. De este modo, engañaremos a nuestro estómago, y tendremos sensación de saciedad mucho antes. Cuando empecemos a comer, ya no tendremos tanta hambre.
4. Beber con inteligencia. Esto es, según ellos, seguir algunos trucos, como añadir gaseosa al vino o cerveza, beber con refrescos light o cero, tomar champagne o cava en lugar de chupitos, etc.
5. Platos saludables en cantidades calculadas. Es mejor elegir carnes y pescados blancos y no cocinar en cantidades abundantes para no estar comiendo estas sobras en los días posteriores.
