La palabra licor, proveniente del latón liquidacere, basa su significado en el verbo disolver, es decir, está referenciado a su producción, pues la creación de los licores se basa en la disolución y maceración de aromas de hierbas, además de otras esencias, para su posterior consumo.
Cuando hablamos de aperitivos, nuestra mente siempre nos indica directamente productos de consumo como aceitunas, frutos secos o patatas fritas, pero no hay aperitivo completo que se precie sin su bebida correspondiente.
No importa si nos acompañan antes de comenzar la comida o después de acabarla, los aperitivos, no serían lo mismo sin su bebida, también denominada aperitivo o digestivo. Ya sean refrescos, cerveza, vino o licores, este producto de consumo ayuda a ingerir de manera más liviana todo alimento que se mastique, además de ayudar a refrescarnos en épocas de calor o a aliviarnos cuando acudimos a un encuentro con prisa, pues tienen un efecto saciante en las personas.
Licores, el complemento perfecto de los aperitivos
Pensar en el momento del aperitivo con una buena compañía, es pensar en un snaks rico al paladar acompañado de una bebida que estimule el apetito. Los licores son los elegidos por la mayor parte de las personas habituales del consumo de piscolabis, pues que se consideran bebidas muy interesantes y atractivas.
Este tipo de consumiciones espirituosas contienen unos principios amargos provenientes de su elaboración que alientan la ingesta de alimentos. Suelen ser habituales antes de una comida más copiosa, como un almuerzo o cena, o simplemente consumidas por puro placer en un ambiente distendido entre amigos.
Históricamente no existían bebidas como los licores para acompañar a los aperitivos, sino que consistían en bebidas secas, más bajas en azúcar, para no consumir glucosa antes de la comida. Con el paso del tiempo esto ha cambiado, pues la mayoría de los licores contienen frutas, casi todas cítricas, que abren el apetito con su consumo.
Eso sí, este digestivo actual suele contener poca graduación alcohólica para no emborrachar a los comensales antes de una comida más copiosa y que las ganas de comer disminuyan.
¿Qué licores son los más consumidos actualmente como aperitivo?
Aunque, como siempre se suele decir, para gustos los colores, la elección de un digestivo que acompañe a un snak siempre es de libre elección por el consumidor, pero sí que existen varias apuestas seguras que siempre ganan a la hora de escoger un digestivo para beber.
Vermouth
La mayoría de los aperitivos tienen como acompañante estrella a este compuesto de vino blanco, ajenjo y sustancias amargas. El Vermouth es un vino típicamente europeo con un aroma elegante y muy característico de reconocer. Una alternativa muy demandada para consumir con productos de picoteo por su carácter refinado y por su variedad según gustos: el vermut o vermouth rojo, de sabor dulce o el blanco, más afrutado y perfumado.
Limoncello
Una de las bebidas más solicitadas entre los amantes del picoteo a nivel nacional, y ganando puestos alrededor del mundo a medida que pasan los años. El limoncello, bebida elaborada a base de cáscaras de limón, se consume habitualmente a temperatura ambiente o muy fríos, dependiendo del gusto del consumidor, y se suele mezclar con zumo de naranja, lima, limón o limonada. El licor de limón Llimonetti es una apuesta segura que casa a la perfección con cualquier aperitivo.
Sangría
Bebida por excelencia del verano español, aunque su consumo se extiende también en épocas más frías gracias a su conjugación de vino y frutas tan aclamadas por los usuarios.
La mayor parte de las sangrías que encontramos para acompañar a nuestro picoteo provienen de la uva garnacha y cariñena, y contienen variados beneficios a quien la consume, como la reducción del riesgo de padecer arterioesclerosis, ayuda a nuestro sistema nervioso a mantenerse sano por ser una gran fuente de vitaminas, en especial las del grupo B.
Por otro lado, equilibra la flora intestinal de los consumidores habituales y, según el Consejo Europeo sobre la Alimentación (EUFIC), la sangría, consumida de manera moderada, es la encargada de hasta un 20% de los efectos positivos que nos aporta la dieta mediterránea.
