La alimentación nos afecta mucho más de lo que solemos pensar. Nos preocupamos por los kilos, pero el tipo de alimentos que escogemos en nuestra dieta diaria puede afectar a más cosas además del peso. Hay una serie de comidas que deberíais limitar si queréis mantener una piel tersa, suave y de aspecto juvenil.
Lo que debemos controlar es principalmente es esto:
-Sal: Un exceso de sal hará que retengamos líquidos y puede provocar la aparición de bolsas bajo los ojos.
-Marisco: Si sois propensos a los brotes de acné, hay que tener cuidado con algunos mariscos, porque son ricos en iodo y si lo consumís habitualmente, podéis sufrir esta reacción.
-Azúcar: Demasiada azúcar en sangre, puede afectar al colágeno de tu piel haciendo que ésta pierda elasticidad. Evita, por tanto, tomar demasiados dulces.
-Alcohol: Puede provocar deshidratación en la piel y a veces, brotes de rosácea.
En general, hay que evitar los carbohidratos refinados porque afectan a la elastina y el colágeno, lo que significa que pueden provocar que los daños externos afecten mucho más a nuestra piel. También deberíais limitar el consumo de snacks.
Próximamente, os informaremos de los alimentos que, por el contrario, vienen bien para cuidar la piel.